Ese día nació una estrella.
Ese día nació la estrella que llenaría de luz, la estrella que nos lleno de risas.
Ese día nació la estrella que nos dio tanto amor.
Ese día, ese día naciste tú.
Una estrella que voló.
Una estrella que ilumina nuestras noches, que nos guía el camino que debemos seguir.
Una estrella.
Mi estrella eres tú.
A pesar de que ya son tres años sin ti la herida sigue sangrando.
A pesar de que seguimos viviendo, reímos y a veces incluso casi somos felices, seguimos echándote de menos.
Mi estrella está en el cielo pero yo sigo sin comprender el por qué.
¿Por qué con la falta que nos haces aquí?
¿Por qué con todas las cosas que nos quedaron por hacer?
¿Por qué? ¿Por qué?
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